A 68 km de
Santiago de Compostela, Palas de Rei es la localidad de la que parte la etapa
más larga del Camino de Santiago Francés a su paso por Galicia: Palas de Rei –
Arzúa. Aquí paran los peregrinos que han salido por la mañana temprano desde Portomarín y han atravesado la comarca de A Ulloa y la sierra de Ligonde.
Su nombre se
debe, según la leyenda a Pallatium regi, el palacio de Witiza, rey visigodo que
mató a Favila, el padre de Don Pelayo.
Con varios
bares y restaurantes, pensiones y albergues, Palas de Rei está puramente
orientada a los miles de peregrinos que llegan a ella todos los años. Sin embargo,
si quieres aprovechar tu llegada para ver algo más en el propio pueblo,
lo más destacable es la iglesia de San Tirso. Todo lo demás, te aconsejo que lo
veas desviándote un poco de la ruta marcada para conocer todos los encantos de su
entorno o quedándote un día más allí para hacer excursiones cercanas y caminar por sus bosques.
Qué ver en
Palas de Rei
1. La iglesia de
San Tirso: el edificio actual data de 1955 e integra una puerta románica del
siglo XII. Al lado de ésta se encuentra un caserón barroco y la estatua de la
Virgen del Socorro.
2. La Laguna de
Las Ranas: en dirección a
Pontecampaña verás este precioso enclave del que podrás disfrutar del croar de
las ranas durante un tramo del camino.
3. El Castillo de
Pambre: es una de las mejores representaciones de la arquitectura militar medieval
gallega. Tiene cinco torres y su origen se remonta al 1375, cuando se construyó
por encargo de los Ozores de Ulloa a orillas del río Pambre. Para llegar al
Castillo de Pambre hay que salir de Palas de Rei por la C-547 en dirección a
Santiago y girar a la izquierda en el cruce, siguiendo la LU-4008 durante unos
4 kilómetros. Abre de martes a domingo, de 11’00 a 14’00 y de 16’00 a 19’00 y
la entrada es gratuita.
👉 Si vienes desde
Portomarín, en Pontecampaña se puede descender a la izquierda siguiendo el
curso del río hasta Sambreixo (1’5 km) y admirar su iglesia. Desde allí, a través
de una antigua Carballeira, llegarás al castillo.
4. Los Torrentes de Mácara: en la parroquia de Ramil, muy cerca del Castillo de Pambre (a unos 2 km), se encuentran estos torrentes formados en el tramo alto del río Ulla, cuando el Pambre se le une. Un sendero natural permite caminar mientras recorremos sus rápidos y sus pozas. Un lugar de increíble belleza natural.
5. El Vilar de
Donas: construido en el siglo XIII, funcionó como centro importante de los caballeros
de la Orden de Santiago. Hoy está rodeado por sus tumbas. Su nombre se debe a
las Donas, las mujeres de estos caballeros que se alojaban en el monasterio,
justo detrás de la iglesia, para esperarlos mientras luchaban en las batallas.