Qué ver en Vitoria en una mañana - Itinerario



Tanto si dejas el coche en la zona de las universidades, como si lo dejas en cualquier parking gratuito y vas al centro en transporte público, el casco antiguo se puede recorrer a pie en una mañana sin problema. Eso sí, despertándose pronto.


El casco medieval está ubicado en La Almendra, una pequeña colina. Este recorrido empieza en la famosa Plaza de España, donde está la Oficina de Turismo, para que puedas pasarte por allí a coger un buen plano.
Qué ver en Vitoria en un día

1. La Plaza de España: su trazado neoclásico data de 1791 y allí está el Ayuntamiento. Debajo de sus pórticos hay infinidad de terrazas y bares de pinchos. Junto con la Plaza de la Virgen Blanca, es la más famosa de Vitoria.


2. La Plaza de la Virgen Blanca: nada más salir de la plaza anterior, te encontrarás con este amplio espacio en el que se está el famoso photocall de Vitoria sobre hierba. Todos los turistas se paran a hacerse fotos aquí. Al fondo, se distingue la iglesia de San Miguel, la Casa de los Arquillos y el Palacio de Villa Suso. Desde allí se ve la bajada del famoso Celedón cada 4 de agosto para celebrar las fiestas en honor a la Virgen.


3. La Parroquia de San Miguel: un templo gótico-renacentista del siglo XIV. En su interior hay un retablo mayor de los inicios del barroco y en su balconada se encuentra un aestatua de Celedón. En frente puedes ver el edificio de Los Arquillos, una solución arquitectónica del siglo XVIII para superar el desnivel existente.




4. La Plaza del Matxete: siguiendo por la derecha, te adentrarás en el casco antiguo de Vitoria. Dejarás el Palacio de Villa Suso a un lado y llegarás a esta pequeña plaza. En ella el Procurador General renovaba el juramento de los miembros del Ayuntamiento sobre un machete bajo amenaza de cortarles la cabeza si no era cumplido. De ahí su nombre. El juramento todavía se puede ver grabado en las piedras que hay debajo del ábside de San Miguel.  


5. La Casa del Cordón: dejando la plaza atrás y la iglesia de San Vicente, atraviesas la calle Cuchillería, famosa por sus bares, y llegarás a esta antigua casa del siglo XV. Debe su nombre al cordón de la orden franciscana del arco de una de las entradas gemelas de la casa. En ella se alojaron Felipe el Hermoso y Juana la loca, y hoy alberga exposiciones.

6. El Museo Fournier de Naipes: siguiendo por esta calle se encuentra este museo en el que ver la evolución de los naipes desde el siglo XV hasta la actualidad.  Está ubicado en el Palacio renacentista de Bendaña. La entrada es gratuita. En el edificio de al lado también está el Museo Arqueológico.  


7. La Catedral de Santa María: al final de la calle se alza la Catedral gótica y, detrás, también merece la pena ver la Plaza de Burullerías, antigua necróplis. Te recomiendo la entrada a la Catedral, aunque tendrás que reservar antes. Es realmente original.


Paseando por las calles medievales de vuelta, encontrarás un montón de edificios y rincones interesantes, como Palacio Escoriaza-Esquivel, los restos de la muralla de la ciudad o la Plaza de Santa María.



8. La Iglesia de San Pedro: dejando atrás las calles medievales y el Museo de los Faroles, que ya no tuve tiempo de visitar, llegas a esta iglesia gótica del siglo XIV. En su interior están los sepulcros de su fundador, Diego Martínez de Salvatierra, de los nobles Pedro Martínez de Álava y su hijo Diego, obispo de Astorga, Ávila y Córdoba, y del diputado general de Álava en 1585, Juan Ruiz de Vergara.


9. La Concatedral de María Inmaculada: siguiendo por la Plaza de la Provincia, la verás al fondo, junto al Parque de la Florida. Conocida como la Catedral Nueva, es un templo neogótico de principios del siglo XX. Es la última catedral que se ha construido en España y puede albergar a 150.000 personas en su interior.


En su girola se puede visitar el Museo Diocesano de Arte Sacro de Álava. La entrada cuesta 3€.
  • Horario de la Concatedral:
    • De lunes a viernes: de 10’00 a 14’00 y de 16’00 a 18’30.
    • Sábados: de 10’00 a 14’00.
    • Domingos: de 11’00 a 14’00.

10. El Parlamento Vasco y el Parque de la Florida: este parque del siglo XIX contiene muchos de los árboles exóticos de la Expo de París de 1855. La vegetación es muy variada y abundan las coníferas, como el cedro del Líbano, los castaños de Indias, los sauces... Así hasta 95 especies diferentes de árboles, entre los que destaca un ejemplar centenario de nogal de más 30 metros de altura. Antes de llegar a él, verás el edificio neoclásico de la sede del Parlamento Vasco.


Si tienes tiempo puedes seguir bajando más hacia al sur para acabar tu camino por la Senda Ibilbidea, dejando a un lado el Palacio Zulueta, el Museo de Bellas Artes o  Villa María, hasta llegar al Palacio de Ajuria Enea, en el que vive el lehendakari. Muy cerca del Paseo de la Universidad para volver a tu coche si lo has aparcado donde lo hice yo.





Me dejé muchas cosas por ver de Vitoria, como el Anillo Verde y sus ciervos. Pero así, estoy obligada a volver.




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