Al norte de la provincia, lindando ya con Ciudad Real, puedes visitar uno de los pueblos con más encanto de Jaén. Chiclana de Segura se levanta sobre la Muela de Chiclana, un monte de 865 metros que le dan una posición estratégica para divisar desde lo alto los territorios de Albacete, Jaén, Ciudad Real y Granada.
Precisamente esta situación privilegiada fue el origen de un núcleo de población árabe que se construyó alrededor un castillo defensivo, en el lugar en el que antiguamente ya se habían asentado los íberos. Fruto de este primitivo urbanismo árabe son sus callejuelas estrechas y la disposición casi errática de las viviendas que aprovecha las laderas de la roca en la que se encuentran.
Citado ya en
tiempos de Fernando III como una de las villas más antiguas del reino, a ella
se llegaba a través de ciertos pasadizos y escalerillas de difícil acceso, que
solventaban el problema de la dureza que ofrecía la piedra del cerro y le aportaban
seguridad y defensa. Este problema se terminó de solucionar ya en época actual
con la construcción de un túnel de entrada al pueblo y un enorme ascensor
panorámico que asombra a los visitantes. Nadie se espera encontrarse con estas infraestructuras
para adentrarse en un pueblo serrano que apenas llega a tener mil habitantes.
Desde fuera
Chiclana aparece imbuida en su roca infranqueable. Una vez dentro, el municipio
aparece plagado de callejuelas laberínticas, muchas de ellas sin salida, y estrechitas
escalerillas que conectan las partes altas con el centro, fruto de ese mestizaje
entre la arquitectura árabe y el trazado medieval posterior. Es en esta época cuando
el núcleo tuvo su mayor esplendor. Época en la que se encontró protegida por la
Orden de Santiago con la Encomienda de Montizón-Chiclana y con comendadores tan
famosos como Jorge Manrique.
A pesar de este auge, siglos posteriores marcaron la historia de Chiclana con varias crisis que moldearon su imagen. Así, sus vecinos se tuvieron que enfrentar al abandono casi total del pueblo en el siglo XVIII; a la Guerra de la Independencia, en la que los franceses quemaron la iglesia y varias casas, matando a quince habitantes de la villa; a las guerrillas carlistas, que asolaron cortijos y viviendas; y a varios desastres, con huracanes y desprendimientos de roca incluidos. El último de ellos, en 2009.
Visitando Chiclana disfrutarás de uno de los lugares más singulares de la provincia, donde tendrás la oportunidad también de probar su rica gastronomía serrana dominada por los andrajos con liebre, los galianos, las migas con aceitunas aliñás, rábanillos, melón y torreznos y la gachamiga con chorizo. Todo ello cocinado con el mejor aceite de oliva con Denominación de Origen.
Qué ver en
Chiclana de Segura
1. Túnel de
entrada: es curioso este túnel, se construyó en 1950 para facilitar el acceso
al pueblo atravesando la roca en la que se encuentran las casas-cuevas de Chiclana.
Las placas de su interior recuerdan a los obreros, al ingeniero y al alcalde
que participaron en esta labor.
2. Casa de la
Encomienda: también conocida como la Casa de la Inquisición, está construida en
estilo barroco del siglo XVII y en su portada se pueden aún ver los escudos de
la Cruz de Calatrava. Se sitúa en el número 15 de la Calle Real, en pleno
centro de Chiclana y bajo la roca en la que antiguamente se asentaba el
castillo.
3. Castillo de
Chiclana de Segura: de origen musulmán y levantado en la parte más alta del
cerro, fue conquistado por Fernando III en 1226 y entregado al Obispo de Osma,
quien lo cedería a la Orden de Santiago, quedando integrando en la Encomienda
de Montizón-Chiclana. En él vivieron sus Comendadores hasta que el siglo XVI se
trasladaron al Palacio de la Encomienda. Uno de sus comendadores más famosos
fue el poeta Jorge Manrique. En 1574 hubo un desprendimiento de la roca sobre
la que se asentaba el castillo, matando a 30 personas y produciendo el abandono
y ruina de la fortaleza. Hoy sólo quedan algunos vestigios de la muralla,
lienzos de algunos muros y partes de un antiguo torreón.
4. Mirador del
Castillo: en el cerro donde se situaba el castillo, aprovechando algunas de sus
ruinas, hay un excepcional mirador desde el que puedes observar unas maravillosas
vistas de cuatro provincias: Ciudad Real, Granada, Albacete y Jaén.
5. Ascensor Panorámico:
junto a los aparcamientos y el túnel que da entrada al pueblo, destaca este
gran ascensor de 24 metros de altura que conecta la parte baja de Chiclana con
los restos del castillo medieval. Se inauguró en el año 2012 y es bastante
curioso. Su acceso es gratuito.
6. Centro de
Interpretación Jorge Manrique: este centro cultural nació con el objetivo de
dar a conocer la figura del poeta, comendador del castillo de Chiclana. En su
interior se realizan conciertos y exposiciones.
7. Iglesia de
San Pedro Apóstol: construida a finales del siglo XVI sobre las ruinas de un
antiguo templo medieval, esta iglesia ha sido objeto de diversos desastres a lo
largo de su historia. En 1811 quedó asolada por un incendio provocado por las
tropas napoleónicas; las tropas carlistas la emprendieron con ella en 1838 y en
1839 un huracán derribó el chapitel de su torre. Hoy sobresale en la Plaza de
la Constitución con su gran escalinata.
8. Cuevas y
pasadizos: en tiempos árabes la entrada y salida del pueblo se hacía a través
de túneles o cuevas excavadas en la roca. Algunos de ellos contaban en su
interior con viviendas, caballerizas, hornos, e incluso una fragua. Una de
ellas comunicaba el castillo con el exterior a través de una escalera labrada
en la roca. La imagen más curiosa la vas a tener desde el aparcamiento, justo al
lado del Túnel de entrada. Desde allí podrás contemplar hasta las escalerillas
que dan acceso a estas viviendas, sus balcones y sus chimeneas. Parece
increíble que alguien pudiera andar por allí arriba.
9. Puente
Mocho: sobre el río Guadalimar, este puente romano del siglo I sirve como frontera
que separa los términos municipales de Chiclana de Segura y Beas de Segura. En
su época sustentaba un tramo de la calzada romana que se correspondía con el
trazado de la Vía Cartaginesa.
10. Pantano
del Guadalmena: en el término municipal de Chiclana de Segura se encuentra el
Club Náutico del Pantano del Guadalmena. En él han tenido lugar competiciones
de motonaútica como el Campeonato de España o el de Europa de Formula 1. El
entorno del embalse está catalogado como Lugar de Interés Comunitario,
destacando los grandes cultivos de olivos y diversas repoblaciones de pinos.
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