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Qué comer en Palencia - 10 dulces típicos palentinos

Palencia está llena de dulces típicos que encontrarás por todos lados. Así, no te faltarán oportunidades para hacerte con candelas, amarguillos de Villoldo, brazos de San Lorenzo de Osorno la Mayor, marzas de Carrión de los Condes, pisuerguinas en Cervera de Pisuerga o helados artesanales Fede Cuesta en la capital.

Si hay algo que me ha llamado la atención de esta provincia es la facilidad que hay para comprar productos típicos por doquier, yendo directamente a los puestos de venta de las fábricas, sin necesidad de pasar por ningún intermediario (Trapa, Uko, Gullón…). Aquí te dejo un ejemplo de los dulces típicos que puedes comprar en la región:

Dulces típicos de Palencia

1. Cejas ZP: he de decir que no tuve oportunidad de probarlas, pero vi el cartel en una calle de Aguilar de Campoo y me hizo bastante gracia.

2. Galletas Gullón: su fundación data de 1892 y hoy es el primer productor nacional de galletas. Su sede está en Aguilar de Campoo y su segunda fábrica es la mayor de Europa. Sus productos se pueden comprar en cualquier establecimiento de España, pero en este pueblo tienen una tienda propia en la que se pueden degustar sus productos y comprar packs variados a muy buen precio.

3. Chocolates Trapa: fundada en 1891 hoy es propiedad de Europraliné. En frente del Monasterio de La Trapa, junto a la autovía, tienen una tienda-cafetería extraordinaria delante de su fábrica. Hay cantidad de productos de la marca a precios más baratos que los que te puedes encontrar en cualquier supermercado. No dejes de probar su chocolate líquido, con el que te regalan unos bombones o unos panecillos. Insisten mucho en que no utilizan aceite de palma.

4. Candelas de Palencia: dulce en honor a la patrona de la ciudad y a las fiestas que se celebran el 2 de febrero en la capital. Su creación es bastante reciente y las comercializa la empresa Saborea.

5. Amarguillos de Villoldo: pastas tradicionales elaboradas a base de almendras. 

6. Brazos de San Lorenzo de Osorno la Mayor: creado en 1991 en honor al santo, consiste en un brazo de gitano recubierto de yema tostada.

7. Pastas Uko: empresa familiar de 1958 especializada en hojaldres y pastas artesanales. Tienen una pequeña tienda-cafetería en las afueras de Cervera de Pisuerga.

8. Marzas de Carrión de los Condes: son típicas de Semana Santa. Tienen forma de un ramo de roscos. El número de roscos dependerá de los años que tiene el niño al que se la van a regalar.

9. Helados artesanales Fede Cuesta en la capital.

10. Pisuerguinas en Cervera de Pisuerga: pastas elaboradas con harina, manteca, huevos, azúcar y anís.


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Qué comer en Palencia - 10 productos típicos de Palencia

Las tierras de Palencia son poco conocidas y visitadas durante los meses de verano, lo que la hacen un destino ideal para adentrarse sin muchas aglomeraciones en los pueblos con aire medieval y en las sendas que la recorren.

Aparte de toda esta gran riqueza, su gastronomía es inmejorable. Si hay algo que me ha llamado la atención de esta provincia es la facilidad que hay para comprar productos típicos por doquier, yendo directamente a los puestos de venta de las fábricas, sin necesidad de pasar por ningún intermediario (Trapa, Uko, Gullón…). Aquí te dejo un ejemplo de los productos típicos que puedes comprar en la región:

10 productos típicos que comprar en Palencia

1. Fabiola palentina: pan tradicional de la tierra cuyo origen parece que se remonta al siglo XVI.

2. Vermú Corito: producto curioso de la Destilería Esteban Araujo. Yo compré dos botellas en la tienda de la Villa Romana La Olmeda. Corito es un localismo palentino que significa desnudo, por eso su logo aparece así.

palgourmet.es

3. Vino de Palencia: existen dos Denominaciones de Origen palentinas: los vinos de Arlanza (que elaboran tinto y rosado) y los de Cigales (blancos, rosados y tintos). Hay bastantes bodegas en la zona, como la del Señorío de Valdesneros, que se puede visitar y cuyo producto estrella es el Vino Amantia, elaborado con la uva de hielo (fruto de la vendimia tardía).

4. Aguardientes Gonqui: fundada en 1934, esta destilería tiene productos tan sorprendentes como una deliciosa crema de torrijas que me pusieron en un restaurante. 

5. Legumbres y productos de la huerta: Palencia tiene varias empresas dedicadas a la producción hortofrutícola. Destacan los cultivos de cebollas, los garbanzos castellanos de la Tierra de Campos, los guisantes, las alubias de la Vega de Saldaña y Valdivia, la lenteja pardina, las patatas de la comarca de la Ojeda y la Valdivia y los pimientos de Torquemada.

6. Carne de Cervera y de la Montaña Palentina: es tan exclusiva que a día de hoy sólo se puede comprar en veinte carnicerías españolas.

7. Cecinas y embutidos: entre ellos destaca la Cecina de Villarramiel, considerada la primera figura de calidad que se otorga en España a la carne de equino.

8. Patés de Selectos de Castilla: empresa de origen francés, con sede en Villamartín de Campos.

9. Quesos: existen varias queserías repartidas por toda Palencia. Son bastante famosos los quesos de Baltanás, de Cevico de la Torre y de Villerías de Campos. Mención aparte se merece el de Eusebio Manzano, un negocio de 1909 que fue premiado en el Cheese World Awards de 2013 por su Añejo Monteviejo.

10. Leche y yogures de la Granja de San Isidro: se encargan de su elaboración los monjes de la Orden Cisterciense del Monasterio de San Isidro de Dueñas. Hay varios puntos de venta. Yo compré varios cartones en la tienda de Trapa.


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Suecia: Opinión del Tant Bruns Kaffestuga HB de Sigtuna


Si vas a Sigtuna, no puedes irte sin visitar una de las casas más antiguas de la ciudad. Se encuentra situada en el casco antiguo, en una de las callejuelas que da a la céntrica Stora Gatan. Te llamará la atención por tener la fachada roja y por la muñeca que hay junto a la puerta.

El edificio consta de varias casas situadas alrededor de un patio interior. En los años sesenta, el barón Gustav von Paykull compró la propiedad y la restauró. Durante las obras se encontraron restos en el techo que indicaban que sus orígenes eran realmente antiguos. De hecho, el propietario está convencido de que data de finales del siglo XVII.


Sigtuna es la ciudad más antigua de Suecia y el Tant Bruns Kaffestuga (el Café de la tía Bruns) es el café más antiguo de esta ciudad. Nada más entrar, ese aire tradicional inundará tus sentidos.

El interior consta de dos salones en los que destaca la decoración vintage con grandes mesas de madera, sillas antiguas y elementos propios de las casas tradicionales suecas. Realmente parece que estés en un museo etnográfico.


La iluminación tenue a base de velas está acompañada por la luz que entra por los ventanales y la que proviene de las pocas lámparas que cuelgan de un techo bajo, como el de una cabaña.


Nada más entrar, el personal del café te atenderá vestido con trajes y peinados de la época para no romper el encanto de realmente sentirte en un local con más de cuatrocientos años de historia.


Su carta es bastante extensa. Ofrece menús, pero lo más popular es acudir a la hora del fica. Algo parecido a la hora del té, cuando se agolpa una larga fila de gente en el patio para poder entrar. Aunque no saben hablar muy bien inglés, sí que tienen la carta en este idioma, lo cual facilita mucho las cosas. Los precios son altos, pero esto es Suecia.

El servicio es agradable, su interior es realmente encantador y sus dulces son inmejorables. Una experiencia de cuento. 


   TANT BRUNS KAFFESTUGA HB   
Laurentii gränd 3, 193 30 Sigtuna, Suecia
Teléfono: +46859250934


Suecia: Opinión del Löfbergs Rosteri & Kaffebar de Estocolmo


Cuando visité Malmö hace unos años hice el descubrimiento de la Caffeine Water. Antes de volverme a España, compré varias botellas para traerme, porque me enganché a ellas. Al llegar a Estocolmo no me la podía quitar de la cabeza y pensaba que la iba a poder comprar en cualquier supermercado o tienda de 24 horas. Pero no fue así. Me recorrí todo el centro de la ciudad buscándola y no la pude encontrar. 


Mirando por internet me enteré de que la marca Löfbergs tenía una cafetería cerca del centro de Estocolmo y hacia allí me dirigí. 

La empresa Löfbergs tiene más de un siglo de historia. Comenzó su andadura en 1906, cuando los tres hermanos Löfbergs fundaron su tostadora de café situada en Karlstad. Hoy sigue perteneciendo a la misma familia, que ya va por la cuarta generación de propietarios y se ha convertido en una de las empresas escandinavas más grandes del sector. Tiene más de 200 empleados y participaciones en otras empresas, como Peter Larsens Kaffe en Dinamarca. Su importancia es tal, que tiene un peso del 20% de la bolsa sueca. 

La cafetería se encuentra situada en la bulliciosa calle Kungsgatan, a unos veinte minutos andando desde Gamla Stan. Es un lugar acogedor donde impera el diseño y la decoración sueca. Una zona del local está dedicada a la tienda (en la que venden botellas de Caffeine Water también) y otra zona al autoservicio, a la que puedes ir a beber agua y agua con limón gratis y a endulzar tus cafés.

Obviamente, el café es su producto estrella. Es el principal proveedor de café en Suecia, tiene sedes en Noruega, Dinamarca y Letonia, y es uno de los mayores importadores de café orgánico y de comercio justo de Europa. Además, está buenísimo. 

Quedé tan encantada con la cafetería que acabé volviendo todos los días que estuve en la capital. 


   LÖFBERGS ROSTERI & KAFFEBAR   
Kungsgatan 3, 111 43 Stockholm, Suecia
Teléfono: +4684455660
en.lofbergs.se