Una visita al Mercado de Motores del Museo del Ferrocarril

Si buscas regalos originales y artículos vintage y, además, eres un amante de los trenes… este es tu sitio.

El segundo fin de semana de cada mes el Museo del Ferrocarril se transforma para dar cabida a uno de los mercados más interesantes de la capital.

Nada más acercarte a la Estación de Delicias podrás ver toda la calle anexa al museo llena de puestos de cosas de segunda mano, desde ropa hasta los objetos más inusuales (como una antigua máquina de oftalmólogo 😨). Al acabar la calle verás la entrada al mercado, que cuenta con tres zonas diferenciadas:

1. Mercado de profesionales: situada en la zona interior, es la más llamativa. Está llena de puestecillos de nuevos emprendedores que buscan hacerse un hueco y darse a conocer. Lo mejor de todo… que puedes disfrutar de las antiguas locomotoras que hay entre los puestos y no parar de hacer fotos desde arriba.

2. La terraza: área descubierta al más puro estilo de los mercados de influencia inglesa. Toda rodeada de furgonetas donde venden comida y bebida, y con el centro lleno de mesas y sillas para disfrutarla. Hasta tiene una zona chill out. Lo más original de este espacio es que tiene moneda propia. En uno de los puestos se cambian euros por monedas del mercado (de 1 y de 0’50). Si te sobran monedas, no te preocupes. Las puedes volver a cambiar por euros en el mismo puesto.

3. El tren infantil: justo al lado de la entrada hay unas pequeñas vías por las que circulan varios trenecitos muy originales, con sus semáforos y con sus túneles. No les falta un detalle.

Además de poder comprar, el mercado también organiza otro tipo de actividades: teatro, conciertos, cine, visitas guiadas… todo gratuito. Y los puestos no dejan de ofrecer degustaciones de todos sus productos.

Un poco de historia:

El primer mercado se realizó en el año 2012 y fue ubicado en la Nave de Motores de Metro Madrid. Inspirado en los mercados ingleses y en el One Hanson Skylight de Nueva York, su homónimo madrileño no paró de crecer y en nueve meses tuvieron que buscar una nueva ubicación porque allí ya no cabía nada. Buena elección la del Museo de Ferrocarril, pues añadió originalidad a la idea.

Actualmente cuenta con más de 100 puestos en el interior y con más de 40.000 visitantes al mes.

☝ Un consejo: ve temprano. Si no te gustan las aglomeraciones, merece la pena ir antes para ver cómo lo están montando y no tener que hacer colas. A la hora de la comida, eso se vuelve casi intransitable. Y hacerse una foto con los trenes, una odisea.

Cuándo abre el Mercado de Motores