El paso principal entre Cantabria y la provincia de León pugna con el Puerto de Piedrasluengas por ser considerado el camino elegido por las legiones romanas de Octavio Augusto para invadir la zona en las llamadas guerras cántabras, salvando la cordillera Cantábrica. Aunque realmente no se sabe con certeza qué paso utilizaron.
Hoy en día el
Puerto de San Glorio es recorrido por la carretera N-621, que parte de la
localidad leonesa de Boca de Huérgano y atraviesa durante 20 kilómetros otros
cinco pueblos de la provincia (Villafrea de la Reina, Los Espejos de la Reina,
Barniedo de la Reina, Portilla de la Reina y Llánaves de la Reina) antes de
llegar a Cantabria.
Una vez en
esta Comunidad, el camino se llena aún más de curvas y aumenta muchísimo el
desnivel, recorriendo 28 kilómetros más hasta llegar a Potes, pasando por
Valmeo, La Vega y Bores, y discurriendo junto a los Picos de Europa y al parque
natural de Fuentes Carrionas y Fuente Cobre-Montaña Palentina.
Conforme nos
acercamos a la cota máxima del puerto, vemos ya el Mirador del Corzo, en una de
las curvas. Construida por el escultor Jesús Otero, la figura del corzo es una
de las imágenes más fotografiadas de esta comarca.
Durante la
temporada alta el mirador siempre está a rebosar de gente y se hace muy difícil
poder aparcar en condiciones y mucho más poder salir del aparcamiento para
irnos.
Pero desde su balconcillo
las vistas de la comarca de Vega de Liébana, del valle de Cereceda y de las sierras
del Cordel y de Peña Labra son inmejorables.
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