1. Ir en barco a las Cuevas de Pak Ou: a dos horas de Luang Prabang, estas dos cuevas presentan en su interior multitud de imágenes de Buda, de todos los tamaños. Tan sólo el viaje en barco merece la pena: paisajes kársticos, selva, el Mekong salvaje…Para hacerlas más enigmáticas y encantadoras, ni siquiera tienen luz. Su interior se puede ver gracias al alquiler de linternas a la entrada o al flash de las cámaras.
2. Ver el Centro de Rescate de Osos de Tat Kuang Si: se
encuentra en pleno parque natural, junto a una de las cascadas más
impresionantes de Laos, con una caída máxima de 25 metros. Los osos han sido
rescatados de las manos de los furtivos.
http://www.freethebears.org.au/web/Projects/Laos/Tat-Kuang-Si-Rescue-Centre/
http://www.freethebears.org.au/web/Projects/Laos/Tat-Kuang-Si-Rescue-Centre/
3. Darse un baño en las piscinas naturales de Tat Sae:
por la mañana Luang Prabang está lleno de minivan y tuk tuk que llevan a decenas
de viajeros hasta allí. Hay na gran cascada que puedes sobrevolar en una
tirolina de 100 metros de largo.
4. Visitar algún centro de artesanía:
- Ban Kok Gniew: el pueblo de
las piñas. Se encuentra en el km 372 de la carretera 13, justo antes del desvío
para Tat Sae. Cualquier tuk tuk te llevará hasta allí.
- Ban Phanom: aldea textil y artesanal
al este de Luang Prabang.
- Whisky Village: también
llamado Lao Lao Village. En realidad es la aldea de Ban Xang Hay, pero se la
conoce popularmente así porque es el lugar donde paran los barcos que van a las
cuevas de Pak Ou y donde te hacen una demostración de cómo se obtiene el famoso
aguardiente lao lao. Allí se puede comprar, degustar y también hay algunas
tiendas textiles y un maravilloso templo. La aldea muestra Laos en estado
puro. Nada que ver con el señorial Luang Prabang.
- OckPopTok Living Crafts
Centre: muy cerca del mercado de Talat se encuentra este taller textil cuya
especialidad son los batik. Hay circuitos gratuitos para visitarlo y una
coqueta cafetería. http://ockpoptok.com/learning-batik-at-the-living-crafts-centre/
5. Visitar una granja: por ejemplo, The Living Land Company,
una granja orgánica y comunitaria que suministra a la mayoría de negocios de
Luang Prabang. Allí te enseñan cómo es su trabajo y te invitan a ser granjero
por un día. Las estancias allí suelen ser caras, para el precio medio de Laos. http://livinglandlao.com/index.php/en/
6. Dar un paseo en elefante: hay muchas empresas que
se dedican a esta actividad cerca de Luang Prabang. Se puede reservar en
cualquier agencia de viajes allí y te recogen en el hotel en tuk tuk. Sin embargo,
la mayoría, por no decir todas, tienen problemas con el modo en que cuidan sus
elefantes. Al menos, así me lo contaron en el Centro de Conservación de Sayabouli. No quise ser partícipe de una actividad así.