Mostrando entradas con la etiqueta Restaurantes. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Restaurantes. Mostrar todas las entradas

Opinión del Restaurante Japonés Hattori Hanzo en Madrid


Me habían hablado tanto de este restaurante que estas navidades me decidí pasarme por allí. La verdad es que la decoración, por fuera y por dentro, es excepcional. Se nota que está todo hecho con gusto por un personal que te atiende con una gran sonrisa.

El restaurante lleva abierto tan sólo desde este verano, por eso es grandiosa la fama que ha tenido en unos pocos meses. Y es que tener mesa aquí es algo casi imposible si no se reserva y… aun así, es difícil.

Su ubicación es bastante buena. Está en Malasaña, muy cerquita de la Gran Vía y de Callao. Desde fuera ya se ve su decoración: todo lleno de farolillos y de pinturas de Hattori Hanzo, un ninja del siglo XVI.



Dentro hay dos espacios bien diferenciados. El primero es el que está montado como si fuera un izakaya. El suelo está con adoquines, simulando una calle japonesa, todo hasta el mínimo detalle. Incluso hay una tapa de alcantarilla con un dibujo de un castillo nipón. Las mesas simulan puestos yatai de los que encuentras a la entrada de muchos restaurantes japoneses. Están bastante chulos.

Opinión del restaurante El Vagón de Beni, Hoyo de Manzanares


Fue una sorpresa descubrir un sitio tan original y tan cerca de Madrid. Este restaurante lo debe todo a su decoración. El ambiente es único. La iluminación, la vajilla, toda la decoración… están cuidados al detalle y  merece la pena una visita para sentirse en pleno viaje en el Orient Express.

Se encuentra en el Hoyo de Manzanares, en pleno centro del pueblo, muy cerca de la iglesia. No hay pérdida, pues desde afuera ya se ven los vagones.

Nada más atravesar la verja te sumergirás en otra época. La decoración es la propia de una antigua estación de tren y, en medio, imponentes, dos viejos vagones. Y hasta éstos tienen historia.

El dueño del restaurante adquirió su vagón principal de madera en los ochenta persiguiendo un antiguo sueño. Lo compró en los desguaces de RENFE y databa de 1931. Durante cinco años trabajó en el vagón remodelándolo a su gusto, aprovechando su oficio de litógrafo y restaurador. Y, en 1994, abrió en su interior el restaurante.

Más adelante adquirió su segundo vagón: un vagón de vía estrecha, de 1890, y donde viajó el mismísimo Alfonso XII. Toda una experiencia comer aquí. Hasta Martes y 13 rodaron el corto “Vía Muerta” en su exterior.


Nada más entrar me sirvieron el pan acompañado de un aperitivo de la casa, que ese día era una sopa de boletus bastante buena. Entra dentro de la cuenta, tanto si se pide como si no (1’50€ servicio de pan con aperitivo). La carta es muy historiada, pero los platos son respetables. 

Precios del restaurante El Vagón de Beni


En general lo recomiendo para una celebración o para un día especial. Para disfrutar de un sitio con historia, con una ambientación increíble y una comida bastante sabrosa. Eso sí, reservad con bastante antelación.



   EL VAGÓN DE BENI   
c/ San Macario, 6
Hoyo de Manzanares
Teléfono: 918 566 812
Móvil: 630 075 218
Cierra los domingos por la noche y los lunes.


Tabernas con historia: Opinión de la Taberna Oliveros - Madrid


Otro buen sitio tradicional donde los haya en Madrid es la Taberna Oliveros. Lleva abierta desde 1857 y es increíble ver toda su decoración. Sitio pequeñito, pero muy acogedor. Te transporta al Madrid de la época mientras se disfruta de un buen vino. Se encuentra en La Latina, en la calle San Millán, muy cerca del Rastro.

Con la consumición te suelen poner una tapilla, que siempre se agradece. Es famoso por su cocido de dos vuelcos.



Desde la calle destaca una portada de azulejos del año 1922, donde aún se lee el lema del local: “Para comer bien y barato, San Millán, 4.”  Y su interior está lleno de fotos de famosos que lo han visitado. Sin duda, un local tradicional que debe estar en la lista de todos los que quieran disfrutar de las tabernas con historia de Madrid. 




   TABERNA OLIVEROS   
c/ San Millán, 4
913 546 252
Madrid

Opinión del Restaurante La Catedral - Madrid


La verdad es que tenía ganas de ir a comer aquí desde la primera vez que vi la entrada. Este restaurante, a escasos metros de la Puerta del Sol y abierto desde 1980, tiene una decoración cuidadísima. Sus tres salones están divididos según su decoración:
● El principal se encuentra frente a las dos entradas que tiene: una en la carrera de San Jerónimo y otra justo detrás, donde ponen la terraza. Este salón es el que normalmente está abierto al público en general y lo llaman El salón de la Puerta del Sol. Está decorado al estilo de las viejas tabernas madrileñas, lleno de fotografías y cuadros.

● El salón superior  está dedicado a Velázquez. Su decoración emula al Barroco de la época y está todo lleno de cuadros de este artista. Normalmente se abre cuando ya no dan abasto en el de abajo.

● El sótano también cuenta con otro salón dedicado a Goya.


Los comentarios de la gente son bastante variados y extremos: los hay a los que les ha encantado y a los que les ha horrorizado. Estos últimos parecen tener un denominador común en la mayoría de los casos: el servicio de cenas parece tener peor fama.




Yo no tuve ninguna queja del local, ni del personal, ni de la comida. Por su situación y decoración la gente espera algo carísimo. Todo lo contrario. Hay varios menús para elegir desde 11’00€, con bebida, pan y postre. Y son muy variados. También hay ofertas de fin de semana. Platos muy bien presentados y abundantes.


   RESTAURANTE LA CATEDRAL    
Carrera de San Jerónimo, 16
28014 Madrid
915 233 556
Metro: Sevilla (Línea 2) y Sol.


Opinión del Bar Las Bravas - Madrid


Las bravas existen desde 1950, que fue cuando los dueños de este local inventaron su receta. Aunque el local original parece que lleva en funcionamiento desde 1933. La auténtica salsa brava sólo se puede probar aquí, las demás son sólo imitaciones, pues la tienen hasta patentada.

Los precios son bastante razonables. Sobre todo el de la ración de bravas (2'90€), que viene hasta los topes de salsa. La tortilla de patatas recubierta de salsa también merece la pena. 


Actualmente tiene tres locales en pleno centro de Madrid:

● Uno en el Callejón de Álvarez Gato, citado en Luces de Bohemia, de Valle-Inclán. Merece la pena pararse en éste por sus espejos cóncavos y convexos y por su historia.
● Otro en Espoz y Mina.
● Y otro en el Pasaje Matheu.

El único problema es el personal. Para ser un sitio tan turístico y tan recomendado.... La amabilidad es cuestionable. Las redes están que arden con el trato  de sus camareros. Parece que ha ido empeorando con el tiempo. Pero, si quieres ir por probar su salsa… sencillamente te lo recomiendo. 

Metro: Sol