Después de llegar del kayak por las Whitsundays,
me monté en la campervan y, con la sal todavía a cuestas, hice de tripas corazón
y ¡a seguir hacia el norte! Por culpa del temporal había tenido que
modificar la fecha de mi itinerario y tenía que llegar esa tarde a
Rollingstone, sí o sí. Me esperaban, mínimo, 4 horas en mi querida Bruce
Highway. Mi idea era haber parado durante el día en Townsville pero, con
lo mal que iba de tiempo, no pudo ser.
La única parada que hice por el camino para
estirar las piernas fue en Bowen, un pueblo que es famoso por sus mangos. Como muestra
su mascota gigante:
El camping que elegí estaba a unos 8 km del
centro de Rollingstone. Apartado de todo y rodeado de naturaleza. Pertenecía a
la famosa cadena BIG4 y contaba con muchas instalaciones, aunque viniendo del
camping de Airlie Beach, todo comparado con éste iba a ser poco.
En la recepción hay una pequeña tiendecilla donde
venden productos básicos, pero… hay que encargarlos el día de antes. Así que
me quedé sin poder comprar nada.
El camping, que a primera vista me había parecido
excepcional, tenía varios puntos que no me gustaron para nada. Todo se organiza
en torno a tres lagos centrales llenos de peces, incluso puedes ver cómo los
alimentan a una hora determinada. Las zonas más baratas, como la mía, están
justo al lado de ellos. Y miiiiles de mosquitos te acribillan a todas horas,
sobre todo al anochecer. Fueron muy molestos y acabé llena de picaduras.
Tienen una camp kitchen, que estaba bastante sucia,
y un espacio central para las mesas y sillas de la cocina. Pero, cuando fui,
las habían quitado para ponérselas al bar de al lado. Es decir, que cené de
pie. No pude ni sentarme.
Los residentes eran todos gente muy mayor, algunos
estaban muy pasados de vino e iban como zombies
por las instalaciones, y con la copa en la mano. No fueron amables para
nada. Parecía como si les incomodara mi presencia y, cuando cogí una
silla que se quedó libre y la llevé a la cocina, casi me matan con la
mirada. Ha sido el sitio de Australia donde me he sentido más fuera de lugar de
todos.
Los baños estaban muy limpios, eso sí. Y las villas
parecían chalets de lujo. Pero el sitio para las tiendas de campaña y las
campervan era una zona totalmente a oscuras, sin parcelar, tan sólo campo. Y…
¡también era la zona donde los ricos del camping llevaban a sus perros a hacer
sus cositas! Vamos, que era el cagaero de perros. Era el
único sitio permitido para hacerlo. Lo ponía en el mapa. Genial.
Lo mejor que tiene este camping es que está justo
en la playa. Bajas las escaleras y te encuentras con el bonito paisaje marino.
Para los que tengan pasta y se alquilen una villa, es un sitio genial. Para los
que vayan menos sobraos y acaben en el “camping ground”… mejor buscad otro
sitio cercano.
Precio: 35$ en el camping ground.
ROLLINGSTONE BEACH CARAVAN RESORT
2 Hen Camp Creek Rd, Rollingstone QLD 4816,
Australia
Phone: (07) 4770 7277 Freecall: 1800 006 567
Email: holiday@rollingstonebeach.com.au
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