El sistema público sanitario australiano está
considerado como uno de los mejores del mismo. Sin embargo, si quieres ser
atendido sin que ten cueste dinero, es necesario que exista un convenio
bilateral entre tu país y Australia en materia de asistencia sanitaria. A día
de hoy yo no conozco la existencia de este convenio en ningún país de habla
hispana. Así que… si no quieres correr con los gastos (carísimos), sólo te quedan dos cosas: ser precavido y contratar un buen seguro de viaje.
Lo primero de todo es llevar un buen botiquín de viaje. Lo segundo es tener sentido común.
1. Cuidado con el sol:
Australia es uno de los países del mundo con más cáncer
de piel. Esto da que pensar. Hasta cuando sea invierno y/o esté nublado, no
te olvides de protegerte bien del sol con crema y con una gorra o sombrero. Los
niños australianos se lo tienen bien aprendido y es curioso verlos bañándose en
las piscinas y en las playas con su camiseta puesta dentro del agua.
2. ¡Cuidado con el agua!
Entre el frío del invierno en el sur y el peligro
de las medusas y demás animales conforme iba dirigiéndome hacia el noreste,
sí que te puedo decir que tan sólo me bañé en el mar dos veces: una en la
barrera de coral y otra en las islas Whitsunday. Y en las dos ocasiones me puse
un traje antimedusas.
Entre los peligros más comunes en el mar están los
tiburones y las medusas. Hay pocas noticias de accidentes con tiburones, pero
los australianos dicen que ocurren más al año de lo que nos creemos, tan sólo
que no quieren hacerse mala publicidad. En cualquier caso, hay que tener cabeza
y aprovechar las piscinas que suelen hacer en las playas con unas redes y
diques especiales para protegerse. En cuanto a las medusas, las más peligrosas
son la Box Jellyfish (Chironex Fleckeri) y la Irukandi (Carukia Barnesi). La primera
de ellas puede llegar a ser mortal. Es común que en las playas haya carteles
explicativos y, junto a ellos, unos dispensadores de vinagre para tratar las
picaduras mientras llegan los servicios de emergencias. Las puede haber durante
todo el año, pero cuando hay más riesgo es de noviembre a mayo. Por eso se
aconseja llevar puesto un traje especial que, aunque no elimina por completo el
riesgo, sí que lo reduce. También es importante que este traje cubra cuanto más
mejor, incluidas las manos.
Otro de los peligros que te puedes encontrar en
el agua son los cocodrilos. Estos habitan en los ríos, manglares, zonas húmedas
y playas del noreste y norte del país. Hay carteles por todos lados avisando de los riesgos. Aun así, siempre hay algún valiente que se baja del coche en
áreas “prohibidas”, luego es común ver coches abandonados en zonas donde se
avisa de este peligro. ¿Sus dueños? Ni idea. Incluso en la playa de Cairns hay
avisos. Algunos puentes tienen a la entrada un cartel prohibiendo bajar del
coche y caminar.
Otros animales acuáticos peligrosos son el pulpo de
anillos azules y el pez piedra.
3. Pájaros peligrosos:
▪ El Casuario llegó a tener el Premio Guiness del ave
más peligrosa del mundo y…¡cómo no!, es australiano.
▪ La urraca australiana (Magpie) es bastante peligrosa
durante la primavera, época en la que están protegiendo sus nidos. Si te ven
como una amenaza, irán a por ti. Y tienen una especial obsesión por romper los
espejos retrovisores a picotazos. Tenlo en cuenta cuando lleves tu coche de alquiler. Si en el camping o zona de acampada tienen avisos de estas
aves, te aconsejo que te vayas a otro lugar cercano, por si acaso.
4. Cuidado en la carretera:
El peligro principal lo tienes con los canguros. Sus
velocidades pueden superar los 60 km/h y dan saltos de más de diez
metros. Los choques con los canguros, sobre todo por la noche, suelen ser el
pan nuestro de cada día. La única prevención es estar atento. Hay señales por
todos lados, pero prima tu precaución. Muchos coches y autobuses están
especialmente preparados para estos accidentes y cuentan con barreras en sus
partes delanteras. Una pena: me encontré muchos más canguros muertos en la
carretera, que corriendo libremente por el campo.
En general, las carreteras están muy bien cuidadas
y en reparación continua. Vi miles de obras a lo largo de mi viaje. Pero
conducir de noche es un peligro y hay muchas ramas y troncos que se caen al arcén.
De hecho, yo tuve que llamar a emergencias porque el coche que me adelantó se
estrelló contra un tronco y acabó boca abajo en la cuneta. Por suerte, los
pasajeros sólo salieron levemente dañados, pero el coche quedó para el
desguace.
5. Arañas y serpientes venenosas:
En algunos campings donde estuve había carteles
que advertían del peligro de las serpientes. Con mi psicosis a cuestas,
siempre miraba bien mis zapatos antes de ponérmelos. En estas zonas
era muy común ver a gente llevando calcetines antileech, para que no se les metiera
ningún bicho. Las mordeduras son muy raras y los remedios se pueden encontrar
en las farmacias. Pero hay que ser precavido. No hay que olvidar que, de las 25
especies más venenosas del mundo, 21 son australianas.
Hay quien dice que hasta hay serpientes que salen
del wáter. Yo, por suerte, tan sólo vino a visitarme esta rana.
Si quieres más información sobre los animales más
peligrosos de Australia, te recomiendo este interesante post.