Muy cerca de Segóbriga, este monasterio es una visita obligada si se está por la zona. Denominado El Escorial de La Mancha, el complejo se erige sobre un cerro, en cuya base se encuentra la localidad de Uclés.
El cerro fue ocupado desde épocas remotas, sabiendo
la existencia de un antiguo castro celtíbero que más tarde ocuparían los
musulmanes para construir una gran fortaleza. Tras la Reconquistas, Alfonso VII
cedería este castillo a la Orden de Santiago en 1174. Y de ahí su importancia.
La Orden de los Caballeros de Santiago se gestó entre estas paredes,
convirtiéndose el recinto en su casa madre.
Para su remodelación habría que esperar hasta el
reinado de Carlos I, en el siglo XVI, cuando la fortaleza medieval se convierte
en el edificio que hoy ves. Esta obra tardaría dos siglos en llevarse a cabo,
de ahí su mezcolanza de estilos.
La Orden de Santiago estuvo presente allí hasta
1808, año en el que Uclés quedó destrozado durante la Guerra de Independencia
contra los franceses. Pero no es hasta la época de la desamortización de
Mendizábal cuando los pocos caballeros de la Orden que allí quedaban
desaparecieron del todo forzosamente.
Tras el saqueo de los franceses y habiendo tenido
diversos usos a lo largo de los siguientes años, el monasterio quedó destrozado
durante la Guerra Civil, sirviendo de hospital al ejército republicano y, más
tarde, durante la dictadura, de cárcel del gobierno.
Finalmente, Franco se lo cedió al Obispo de Cuenca
y sufragó su restauración, utilizándose como Seminario de la Diócesis hasta
2012. Hoy alberga un centro de espiritualidad.
Cómo es la visita turística al Monasterio de Uclés
Justo antes de llegar al pueblo hay un mirador
donde se puede dejar el coche y hacer unas fotos con el imponente monasterio de
fondo. Es increíble cómo un edificio de estas características se encuentra en
una zona así.
En la entrada, a la derecha, se compran las
entradas y se dan las audioguías para realizar el recorrido por sus distintas
dependencias.
● La antigua fortaleza: la visita comienza saliendo
del edificio por la entrada principal para observar las torres (Torre del
Pontido y Torre del Palomar) y lo que queda de la muralla medieval mientras rodeas el edificio. Las dos primeras torres son de origen árabe, se calcula que
están construidas en los siglos IX y X. También se puede ver una tercera torre,
de origen cristiano, del siglo XIII.
● La fachada: dejando las torres a tu espalda se disfruta de la imponente fachada churrigueresca del monasterio, atribuida a
Pedro de Ribera y construida en 1735. En su cúspide está el Apóstol Santiago
con su espada, recordándonos a la Orden de Santiago.
● El patio: volviendo al interior del monasterio y
atravesando el pasillo llegarás al claustro: un claustro barroco con arcos de
medio punto en cuyo centro se erige un brocal del aljibe.
● El refectorio: desde el patio, a la derecha se
encuentra el refectorio. Aún se sigue utilizando como comedor para las
convivencias y los retiros espirituales que se realizan en este monasterio. Su
importancia radica en el techo, ya que tiene un impresionante artesonado
labrado en madera de pino y rodeado por 36 casetones que representan caballeros
de la Orden de Santiago presididos por Carlos V, impulsor de la misma. Es una
de las estancias más antiguas.
● La sacristía: actualmente se usa como capilla. Se atribuye a Vandelvira y cuenta con un estilo
plateresco con una bóveda de crucería que marca la transición del gótico al
renacimiento.
● La iglesia: construida por Francisco de Mora,
discípulo de Herrera y quien terminó El Escorial a la muerte de éste. Data de
1598 y está distribuida en una nave con capillas laterales, crucero y cúpula sobre
pechinas.
En las capillas laterales de la iglesia se ubica el
Museo. En él puedes ver información sobre Uclés desde la época romana y sobre
la Orden de Santiago. También se expone el calvario gótico procedente de la
capilla de la antigua fortaleza medieval donde estaban enterrados Jorge
Manrique y su padre.
● La escalera: al otro extremo del patio verás una gran escalinata del siglo XVII. En lo alto puedes admirar un gran lienzo
en el que se representa la aparición del Apóstol en la batalla de Clavijo. En
frente, hay otro gran cuadro con la imagen de la Inmaculada, Virgen a la que
veneraban mucho los caballeros de la Orden.
● El claustro superior: arriba se halla el austero
y sobrio pasillo correspondiente al claustro superior, y un montón de salas
cerradas destinadas al alquiler para exposiciones, eventos y convivencias. La
única sala a la que podrás acceder libremente es la que da entrada al coro de
la iglesia, desde donde hay una excelente vista del retablo mayor.
● El zaguán: ya de vuelta a la entrada del monasterio
puedes aprovechar y parar en la tienda de productos típicos. Antes de llegar a ella te encontrarás con la antigua sala de visitas, que tiene una gran mesa de
mármol que estaba ubicada en la antigua sacristía. Los productos son caros,
pero de gran calidad. También tienen página web: www.herassanz.com
No hay cafetería, pero sí una máquina de café y
refrescos en la entrada.
Al lado de la tienda están los servicios,
que parecen tan antiguos como el resto del monasterio. Os recomiendo ver sus
puertas interiores, todo un viaje al pasado.
Horarios del Monasterio de Uclés
- De noviembre a febrero: de 10’00 a 18’00
- De marzo a mayo y septiembre y octubre: de 10’00 a 19’00
- Julio y agosto: de 10’00 a 20’00
Se puede acceder al monasterio hasta una hora antes
del cierre.
La visita con la audioguía dura una hora, más o
menos.
Precio de la entrada al Monasterio de Uclés
- General: 4€ (incluye la audioguía)
- Menores de 12 años: gratis.
MONASTERIO DE UCLÉS
C/ Castillo s/
Uclés (Cuenca)
969 135 058