Aguas arriba, puedes ver un famoso balneario de 1900, que estuvo
abierto hasta 1986. Pero es aguas abajo lo que más interesa a los turistas: la
Cola de Caballo, la cascada del reguero Valdorria.
Cruzando la carretera y siguiendo las indicaciones atravesarás una garganta en la que hay dos puentes y varias pasarelas. Hay que tener cuidado, pues son resbaladizos en algunos tramos.
Al poco tiempo llegarás a la pasarela metálica que da acceso a la
Cascada de Nocedo de Curueño. Un hermoso rincón, encajonado entre dos paredes,
en el que el agua cae vertiginosamente y con fuerza haciendo un ruido
ensordecedor.
En la montaña hay abierto un pequeño hueco que el arroyo Valdecesar utiliza para desembocar en el río Curueño, cayendo para salvar el gran desnivel de 4 metros que lo separa de éste. Su camino, sin embargo, es bastante corto pues, en menos de doscientos metros, ya ha conseguido su objetivo: fundirse con las aguas del río.
La caminata termina aquí y se vuelve al parking por el mismo camino. No obstante, si te has quedado con ganas de más, existe un sendero que lleva a la parte más alta de la cascada. Para llegar a él basta con volver al puente sobre el Arroyo de Valdecesar. Al otro lado de éste, aparece una senda más marcada y que comienza con un exigente ascenso. Wikiloc. También puedes aprovechar y visitar la Cueva de Llamazares.
🏃 Longitud: menos de1 km (ida y vuelta)
🏃 Dificultad: muy fácil
🏃 Duración: 30'
🏃 Recorrido circular: No
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